Manos perfectas gracias al yoga
Son conocidas las ventajas del yoga en términos de relax, paz espiritual y otras cuestiones relacionadas. Sin embargo, pocos relacionan esta práctica oriental milenaria con la belleza de las manos. La realidad es que el yoga puede ayudarnos a disfrutar de manos hermosas, flexibles y saludables.
Es habitual que luego de una larga jornada de trabajo nuestras manos estén cansadas y doloridas, tanto por quehaceres hogareños como por las actividades realizadas en la oficina. Si no tenemos en cuenta estos dolores, enfermedades como la artritis, la tendinitis o el síndrome del túnel carpiano nos aquejarán con el paso del tiempo.
Es así que se aconseja cambiar continuamente nuestra postura, para no repetirla demasiadas horas seguidas y generar movimientos repetitivos que puedan ser perjudiciales para nuestras manos. Otra práctica muy saludable es realizar estiramientos de manos varias veces al día, entrelazando los dedos con las palmas de las manos hacia afuera y estirando los brazos lo máximo posible.
En tanto, los denominados ejercicios yóguicos de manos pueden ser realmente muy beneficiosos. Algunos de ellos son:
Es habitual que luego de una larga jornada de trabajo nuestras manos estén cansadas y doloridas, tanto por quehaceres hogareños como por las actividades realizadas en la oficina. Si no tenemos en cuenta estos dolores, enfermedades como la artritis, la tendinitis o el síndrome del túnel carpiano nos aquejarán con el paso del tiempo.
Es así que se aconseja cambiar continuamente nuestra postura, para no repetirla demasiadas horas seguidas y generar movimientos repetitivos que puedan ser perjudiciales para nuestras manos. Otra práctica muy saludable es realizar estiramientos de manos varias veces al día, entrelazando los dedos con las palmas de las manos hacia afuera y estirando los brazos lo máximo posible.
En tanto, los denominados ejercicios yóguicos de manos pueden ser realmente muy beneficiosos. Algunos de ellos son:
- Poner el codo derecho sobre una superficie plana, ubicando la palma de la mano derecha girada hacia ti.
- Posicionar la muñeca izquierda en la palma de la mano derecha. Dejar que la gravedad tome el control mientras el brazo izquierdo queda suspendido.
- Respirar en forma profunda varias veces y luego arquear hacia arriba la muñeca de la mano izquierda con sumo cuidado, en la dirección contraria a la que estaba suspendida.
- Realizar esta serie de ejercicios en forma idéntica pero en el otro lado del cuerpo, o sea con la mano izquierda aguantando la muñeca derecha.
Manos perfectas gracias al yoga
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