Adiós al envejecimiento de los labios

El paso de los años también se nota en los labios, y esto repercute mucho en el rostro. Aquí encontraras algunos recursos para hacerle frente.

Una de las manifestaciones que producen un aspecto de envejecimiento en la cara es, sin dudas, el resecamiento de los labios, la reducción de su grosor y su deshidratación. Esto se explica porque el envejecimiento da como resultado una pérdida de la densidad de las mucosas.

La acción mecánica más la acción enzimática ayudan al aumento gradual del ácido hialurónico en las mucosas. Los labios poseen una gran movilidad y están altamente vascularizados.

Por ejemplo, es sabido que la presencia del ácido hialurónico es menor en los labios que en las mejillas o en los surcos nasogenianos.

Una de las claves para estar joven es tener una boca joven. Y tenemos que tener en claro que el deterioro de la imagen de los labios incide fuertemente en la apariencia general del rostro.

La razón esencial de una formulación específica para labios se sustenta en que la fisiología de los labios es distinta a la de la piel. Están bastante móviles y vascularizados y suelen degradarse a causa de los malestares mecánicos, los shocks térmicos y también debido a los radicales libres.

Se recomienda el uso de productos que contengan ácido hialurónico, pues están formulados especialmente para eso, por tener la virtud de adaptarse mejor a los movimientos de la boca, y por ser más resistentes a los fenómenos específicos de degradación de los labios. Asimismo, en cualquier tratamiento la clave para obtener un resultado óptimo es tener respeto por las proporciones.

Imagen: tustrucos.com